En un extremo (cerca del camino Imperial) de los huertos se alza la torre de los señores del pequeño latifundio, los Tressling.
3.- Viajando por el camino Imperial hacia Perricum, es posible ver, arriba apartada en un peñasco a los pies del Muro de Rastul un apartado condominio mal comunicado con el camino Imperial, pues requiere abandonarlo, hacer campo a través, y ascender sin camino alguno cuesta arriba en un ascenso rocoso pronunciado hasta llegar a él. Quienes conocen, saben que el origen de este condominio es un pequeño fuerte para vigilar el paso entre las montañas, alrededor del cual han crecido algunas casas e incluso una posada, El Vigía.
Se dice que todo esto es fruto de la maldición de una bruja antaño, de la que la familia nunca se ha recuperado.
En la historia de esta zona, destacan los sucesos acaecidos entre la noche del 19 de Rahja y la madrugada del 20 de 1021 CB.
Después de que Borbarad muriese (23 Ingerimm), brujas oscuras leales a él que habían estado luchando en la Puerta del Trol (la ultima batalla de la guerra de Borbarad) avanzaron sobre el Reino Medio una vez los ejércitos que se enfrentaban al nigromante se disolvieron, y llevaron con ellas muertos vivientes.
Aquella noche, avanzando hacia Perricum se enfrentaron y superaron la barricada que los Tressling y (principalmente) los soldados del fuerte habían montado en previsión de que eso sucediese.
Un cuervo llegó a Perricum el 20 de Rahja con la noticia de que los muertos se dirigían hacía allá, pero los soldados de Perricum que salieron a su encuentro lo que encontraron fue una carreta que portaba un sillón formado por huesos en el que descansaba una bruja asesinada de un flechazo en la cabeza, con dos caballos que tiraban del carro -efectivamente rumbo a Perricum- una aldea quemada mas adelante, pero los muertos vivientes no llegron a Perricum, encontrados en la desembocadura del Darpat o tirados pudriandose en el camino Imperial sin llegar a su destino.
Los supervivientes de la aldea quemada hablaban de que los muertos avanzaban por el camino Imperial con el carromato de la bruja, pero que la mayoría salieron caminando del Darpat y prendieron fuego al poblado con antorchas que arrebataron a los propios pueblerinos.
El poblado, marcado por los malos presagios, nunca se reconstruyó y todavía puede encontrarse, reconquistado por la maleza entre Waserburg Aguaburgo y Bocamardra, donde el Darpat recibe un afluente sin nombre que baja desde los Dientes del Trol.
Mención aparte en el paso entre Muro de Rastul y los Dientes del Trol son las viejas historias que cuentan que, cercana a los Dientes del Trol, en algún lugar de esta zona queda una antigua senda de Trol olvidada y perdida en los tiempos modernos.