En otro de sus textos, Josema Romeo habla de la baraja de Inrah, una baraja de tarot.
Bailarines, artistas, acróbatas, músicos, malabaristas, prestidigitadores, bromistas y domadores de animales forman parte de la misteriosa comunidad de juglares que a menudo está envuelta en un velo romántico. En realidad, sus vidas se caracterizan por viajar por caminos polvorientos, actuar en ferias sucias y ser acosados por milicianos descontentos. Una vez que la audiencia comienza a reunirse alrededor de sus coloridos carros y tiendas para ver la actuación, sin embargo, todos las penurias se olvidan y los artistas viven sólo para los vítores de la multitud.
Las cartas de Inrah son más comunes entre los charlatanes, tanto para la farsa como para la verdadera adivinación. Gracias a la invención de la imprenta, casi todas los juglares ambulantes poseen una o dos barajas y tienen al menos una persona familiarizada con la interpretación de las mismas. Sin embargo, muchos adivinos prefieren las cartas dibujadas a mano y fijadas en finas placas de madera.
La primera mención que se hizo de Inrah fue en Thalusa hace más de 500 años. Los dibujos representan una fusión de las leyendas de muchos pueblos.
Estas cartas, a menudo de colores alegres, representan a los trece dioses conocidos, los ocho planetas (semidioses) y la Marca de Mada (la luna), Sumu y Los, símbolos de la vida y la muerte, signos de la vida cotidiana (el Sultán/el Emperador, el Toro o el Pan). Algunas variaciones conocidas del Inrah son: el árbol, el árbol de la vida, la rueda del destino (pequeña y grande), la estrella de la iluminación y, en el Desierto de Khôm, Rastullah y, en la isla de Maraskan, Rur y Gror.
Un mazo consta de 121 cartas, que se dividen en 49 cartas de figuras o grandes arcanos y 72 cartas de triunfo o elementos.
Las Cartas de Figuras o Grandes Arcanos, son 49 cartas que constituyen la parte ocultista del juego. Las cartas tienen figuras representando a los 13 dioses, las ocho estrellas errantes (semidioses), la Marca de Mada (la Luna), Sumu, Los y símbolos de la vida cotidiana.
Los 13 Dioses y sus correspondientes cartas son la justicia (Praios), el honor (Rondra), el infinito (Efferd), la lealtad (Travia), la muerte (Boron), la transformación (Hesinde), la determinación (Firun), la vida (Tsa), la audacia (Phex), la fertilidad (Peraine), la artesanía (Firun), la pasión (Firun), y la maldad (el innombrable).
Los semidioses representados son la armonía (Horas), la victoria (Ucuri), la creación (Simia), la guerra (Kor), la astucia (Nandus), la libertad (Aves), la perfección (Marbo), la virilidad (Levthan), la futilidad (Xeledon), la magia (Mada), la noche, las estrellas, el Mundo (Sumu), el Orden Cósmico (Los), y el caos (Borbarad)
Y las representaciones de la vida cotidiana son: el emperador, el sabio, el río, el mar, la montaña, el árbol, el toro, el pan, el mendigo, el comerciante, el granjero, la sharisad (bailarina arcana tulamyda), la caravana, la fortaleza, la ciudad, la giganta, el trol, el enano, el elfo, el djinn, y el dragón.
Las ultimas 72 cartas son las llamadas cartas de los Elementos. Están divididas en 6 palos, que representan los elementos (fuego, agua, aire, mineral, humus y hielo). Cada uno de estos palos esta dividido en las cartas de la corte (escudero, caballero, profetisa, mago, príncipe) y las cartas numéricas, que van desde As hasta el siete. Cada una de estas cartas posee un significado, de modo que si el As de Humus significa Vitalidad, el de Agua significa Transformación.
Por otra parte, estas 72 cartas, también forman parte del mazo de Boltan. El boltan es tanto un juego de dados como un juego de cartas (ya que también es llamado un juego de cinco cartas). Como juego de cartas, se juega tratando de pretender tener una buena mano con las cartas boca abajo. El ganador es el jugador que tenga la mejor mano o que haya podido hacer trampas. El juego de dados se juega normalmente con cinco dados. Como las apuestas son a veces muy altas, el juego ha sido prohibido en algunas ciudades.
Hosha reworim
